¿Podemos seguir hablando de la masturbación femenina, del aborto sin ser "transfóbicos"? Esta es la pregunta que se hacen las feministas, que son acosadas por ciertas activistas trans en las redes sociales cuando hablan del cuerpo femenino. Denuncian un "transactivismo" que invisibilizaría a las mujeres. Los intercambios están en desacuerdo, hasta el punto de derivar en amenazas de muerte de ambos lados, lo que da una idea de la "histerización" del debate, se tenga útero o no.


Puede ser un debate de nicho por ahora, pero bien podría volverse cada vez más importante. No estamos hablando del velo ni de la prostitución, no no (porque tampoco es simple, eh), sino de la relación con la cuestión “trans” en el movimiento feminista. Chocan dos “campos”: por un lado transactivistas y por otro, las denominadas feministas “radicales”, también llamadas “  Rad fem  ”. Muchas de estas feministas creen que el transactivismo debilita las luchas feministas.

Marguerite Stern, ex Femen y en el origen del movimiento de collages contra los feminicidios en las calles, lanzó un adoquín en el estanque con un largo post sobre el tema en las redes sociales. "  Lo que plantea un problema es que sus luchas están tomando cada vez más lugar en el movimiento feminista cuando son personas ultraminoritarias", denuncia. Según ella, incluso sería "  un nuevo intento por parte de los hombres de tomar el poder, de infiltrarse en las luchas feministas". Ella da el ejemplo de trans que marcharon en la primera línea de la marcha de   “ Todos nosotros ” contra la violencia doméstica, como una forma de reclamar esta lucha. 

Más allá de este ejemplo, si Stern reaccionó así es porque el debate se viene gestando desde hace algún tiempo en las redes sociales. Y cuando te enteras, es bastante confuso. Varios relatos que hablan de la sexualidad femenina y los cuerpos femeninos han sido acusados ​​de transfóbicos, por no haber "incluido" el tema de las trans. Una mujer trans que se llama a sí misma en Twitter e Instagram "  agresivamente trans  " - no se puede inventar - estaba en contra de una campaña de una feminista porque pidió que hablemos sobre el clítoris en los libros de texto . “Esta campaña no nos incluye, no nos respeta. Merecemos una disculpa  ” , decía su tuit. Solo eso.

Contactamos a Aggressively Trans, quien explica: “  No todas las mujeres tienen clítoris. Las mujeres trans no lo hacen. El clítoris es un órgano, no un símbolo de feminidad   ”. Y para añadir  : “hay, nos guste o no, hombres trans que tienen clítoris. [mujeres que se definen como hombres sin haberse operado, si no se hace seguimiento, nota del editor] Ellos también han experimentado la invisibilización de este órgano en nuestra sociedad, es injusto no incluirlas ”. Toda una lógica. 

¿Todavía se puede hablar de orgasmo femenino? Dora Moutot, joven feminista que creó la cuenta “  T'as joui?  »Muy seguida en Instagram, conocida por haber contribuido a la libertad de expresión sobre la sexualidad femenina, también fue criticada por no incluir trans. Ella respondió que simplemente no era el ángulo de su lucha, ella quien desea denunciar "  la opresión del cuerpo de la mujer nacida sexo mujer y su sexualidad". "No tenemos la misma biología y por tanto no tenemos la misma experiencia, ni los mismos problemas que las personas trans  " , explica Dora. "  Existe una gran preocupación por el '  terrorismo de izquierda  ' en el feminismo de hoy, un '  pensamiento de derecha' "Lo que impide cualquier discusión constructiva sobre el tema trans y lo que eso implica para las mujeres", agrega.

"Deconstruye la palabra mujer"

En lógica trans, ese es un diccionario completamente nuevo para usar. Trans agresivamente lo afirma como tal: “  hay un idioma completamente nuevo que aprender, que yo mismo he aprendido  ”. Así, la palabra "cis" -género, etimológicamente "del mismo lado", para designar a las personas que están de acuerdo con su sexo biológico, a diferencia de las trans. Para ser más "inclusivos", algunos también afirman hablar de "personas con vulva" o "personas con penes" en lugar de hombres o mujeres, ¡considerados demasiado reduccionistas! Esto también lleva a algunas incongruencias del género: ya no se habla de "mujeres embarazadas", sino de "personas embarazadas". Al querer demasiado ser inclusivo, perdemos a todos. Trans agresivamente también afirma " deconstruir el significado de la palabra mujer   ”, lo que hace saltar a las feministas radicales.

De hecho, hay dos visiones opuestas sobre lo que es ser mujer o ser hombre. Las personas trans reclaman la “autodeterminación” de su identidad de género, y una disociación total entre el sexo biológico y social: nos sentimos como un hombre o una mujer, independientemente de nuestros genitales. "No respetar esta autodeterminación es no reconocer a las personas trans, es transfóbico   ", subraya Véronique Godet, portavoz de la homofobia SOS.

Esta es también la concepción del derecho francés: para cambiar de género en el estado civil, basta con preguntar a un juez, sin probar que se ha pasado por una operación de reasignación de sexo. Por otro lado, para algunas feministas "radicales", el sexo biológico sigue siendo un factor nada despreciable y que en parte define quiénes somos, aunque también sea necesario combatir los estereotipos de género (no es porque que somos mujer que somos dulces y amables, eh).

Pero, ¿hasta dónde deberíamos aceptar la autodeterminación del otro? Tienes cuatro horas. Aún así, varias lesbianas han sido acusadas de transfobia ... simplemente por no querer tener una relación con una trans que conservaba sus genitales masculinos. “  Las personas trans quieren que las encontremos sexualmente deseables ” , explica una lesbiana que se puso en contacto con nosotros y que quiere permanecer en el anonimato, “  asqueada  ” por lo que vive a diario en determinados lugares de encuentro o asociaciones. “  Pero tengo derecho a no sentirme atraída por una persona que tiene un género masculino”, explica. "La conversación trans es como una terapia de conversión,(estas terapias utilizadas por la religión para cambiar la orientación sexual, nota del editor) ”, dijo. “Quieren cambiar nuestra perspectiva sobre nuestra propia sexualidad. Si tienes que tener relaciones con alguien que se define como mujer, es casi una vuelta a la heterosexualidad ”.

Y, de hecho, cuando se le pregunta a Aggressively trans sobre eso, ella no entiende en absoluto por qué una lesbiana no se sentiría atraída por una trans. “  No estoy segura de entenderlo ”  , dijo , “siempre que la persona se defina a sí misma como mujer ... Tal vez pueda haber odio por los genitales masculinos”. En varias ciudades, Burdeos, Nantes y Estrasburgo, los grupos de lesbianas incluso han explotado, a raíz de estas disensiones frente al activismo trans.

Testículos y bikini brasileño

En el exterior, especialmente en el mundo anglosajón, el debate hace tiempo que dejó de estar confinado a las redes sociales y ya se ha extendido a la vida “real”. Una manifestación pro aborto en Canadá fue interrumpida por activistas trans con el argumento de que no les concierne. Descubrimos en algunos sitios de "Rad fem" como Red Root , la historia de esta casa de Vancouver para mujeres víctimas de violación, que siempre se ha negado a trabajar con hombres, ya que da la bienvenida a una audiencia de mujeres traumatizadas, y que ahora se ven privadas de un subsidio porque no dan la bienvenida a las trans.

Otra noticia, todavía en Canadá, una oscura historia de la camiseta brasileña. Una activista trans presentó una denuncia contra una esteticista que canceló su cita en bikini porque no quería depilarse los genitales masculinos. “  ¡Transfobia!  »Protestó este activista, quien finalmente perdió su caso. También hay algunos absurdos por parte de las "feministas radicales", como en Londres, donde las mujeres protestaron el año pasado contra la posibilidad de que los trans naden en un estanque hasta entonces reservado para las mujeres. No debemos cruzarnos un pene, sería el fin del mundo.

Por el momento, en Francia, el debate sigue siendo sobre todo “virtual”, pero muy violento. Algunas feministas radicales tienen comentarios muy anti-trans: “  estos son hombres disfrazados”, “nunca serán mujeres” … ellas mismas han recibido cientos de mensajes de acoso de cuentas trans . “Se vuelve peligroso hablar sobre este tema porque nos acosan inmediatamente  ”, testifica también Marguerite Stern, quien incluso cree que en la web, “  criticar a los transactivistas es incluso más difícil que criticar las religiones  ”. 

Después de su cargo, Stern fue acusada de ser un "Terf". Aquí, otra palabra nueva. Significa "  feminista radical transexclusiva  " o "feminista radical que excluye a las trans" (un término que a veces reivindican algunas feministas). Incluso recibió “los Terfs en juego”. La que inició los collages contra los feminicidios se encuentra, por tanto, amenazada de muerte. Atmósfera. 

¿Quién es más discriminado? ¿Quién es el más "privilegiado"? Es un poco de la competencia absurda en la que están involucradas algunas feministas y algunas trans. A las personas trans les gustaría que se reconociera que experimentan exactamente el mismo sexismo que las mujeres de "género cis". A lo que Stern responde: "  He sido discriminada como mujer desde que nací, este no es el caso de las trans que han optado por convertirse en mujeres" . "  ¿Por qué, entonces, pasan su tiempo atacándonos en lugar de luchar con nosotros contra la agresión sexual y la violación?"  Agrega otra feminista.

El hecho es que, sin lugar a dudas, las personas trans experimentan una discriminación específica como trans, porque interrumpen radicalmente nuestra relación con el sexo y el género. En estos enfrentamientos entre hermanos (hermanas) cis-género o trans enemigos, siempre es el patriarcado el que gana. •

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