Jordi Évole, Ana Pastor y el "periodismo objetivo"
Salvados se ha convertido en un programa tan popular que cuando digo que no me gusta todos me saltan al cuello. "¿Pero cómo no te puede gustar?", "es que tú o es un programa comunista o nada", "el caso es criticar por criticar, sectario". Y claro, algo parecido ocurre con el programa El Objetivo, o más bien con su presentadora Ana Pastor. A todos les gusta. A los de izquierdas, a los de derechas, a los de centroizquierda, a los de centroderecha. Todos, por una vez, se ponen de acuerdo en algo: Ana Pastor es una periodista genial, que "se mete con todo el mundo, sea de la ideología que sea" y que encima es muy buena entrevistando. |
Jordi Evole (protagonista del programa Salvados) y su colega Ana Pastor se han convertido en vacas sagradas: son prácticamente incuestionables, te tienen que gustar sí o sí y si no es que eres un sectario o peor aún: un comunista resentido y malvado que lo crítica todo y a todos.
Uno de los mayores halagos que reciben estos dos personajes es que son muy objetivos. De hecho el programa de Ana Pastor se llama así: "El Objetivo". Todo lo que se dan son cifras, se habla con gente de toda ideología y se evita parecer ser de izquierdas o de derechas. Los entrevistadores son pues neutrales. Esto a la gente le encanta, por supuesto. Y a los dueños de la cadena aún más, pues en la objetividad está la clave para atraer a grandes audiencias sean de izquierdas, de derechas o más o menos apolíticos. Todo el mundo cabe en estos programas, a nadie se le discrimina. No son ni de izquierdas ni de derechas. De hecho, Evole en una entrevista que le hizo la propia Ana Pastor afirma lo siguiente:
Creo que a veces nos obsesionamos con que no se nos note el pie del que cojeamos [en referencia a su ideología]", y a continuación dice: "Pues un día, hablando con amigos, llegamos a la conclusión de que [ser de izquierdas o de derechas] es algo estético."
Esto suena perfecto para la sociedad en la que vivimos. Una sociedad que acepta la idea de que todas las ideas son respetables, de que "cada uno tiene su opinión y hay que respetarla" y de que si no toleras toda ideología es que eres un radical dogmático. Todo (o casi todo) vale, hay que dar voz a todos y no meterse más con unos que con otros. Y claro, los mandamases de laSexta (canal en el que se emiten ambos programas) a los que sólo les importa la audiencia se relamen y aplauden.
Ahora toca plantearse dos preguntas. La primera es si realmente Ana Pastor y Jordi Évole son objetivos y neutrales. La segunda es si ser objetivo y neutral es algo bueno o por el contrario algo que deberíamos condenar.
¿Son Ana Pastor y Jordi Évole ideológicamente neutrales? La respuesta es un no rotundo. Lo siento mucho por sus seguidores, que creen que cuando les ven por la tele están presenciando algo neutral y vacío de contenido ideológico, pero va a ser que no.
Ni cuando Ana Pastor le hace una entrevista al presidente de Ecuador cargada de mentiras y falsas acusaciones ni cuando Jordi Evole va a Cuba intentando malmeter y reproducir las falacias de los medios de masas están siendo neutrales. Y lo peor es que ambos hicieron el ridículo en ambas empresas. Tampoco Évole era neutral cuando dijo que "me voy a ahorrar decir lo que pienso sobre Chávez ahora que está enfermo" mientras esbozaba una sonrisa en el plató de laSexta Noche. Ni Ana Pastor cuando llama a los estudiantes antifascistas "fascistas de izquierdas".
Jordi Évole no fue neutral cuando hizo su primera entrevista al político comunista Julio Anguita. Más bien fue un payaso, un bufón del régimen. Planteó preguntas estúpidas, insinuó que Chávez es un dictador, que Zapatero es lo más a la izquierda que tuvimos nunca y que era un poco hipócrita que un comunista tuviese un buen coche y dinero. Cualquier persona que crea que el periodismo es algo serio y de trascendencia apagaría la tele al ver esa entrevista.
Ana Pastor no fue neutral cuando acusó al diputado de Izquierda Unida Alberto Garzón de haber pactado con el PP en Extremadura, reproduciendo una acusación clásica del PSOE. Garzón intentó explicar la realidad: que se habían abstenido y que no daron su apoyo al PP, pero la periodista cambió de tema, con ese intento habitual en ella de querer ser el centro de la entrevista con sus preguntas incisivas e impertinentes, con sus interrupciones y sus pullas.
Podría escribir muchos ejemplos más, pero no lo haré por razones de espacio. Concluyamos que ni Evole ni Pastor son neutrales, sino que más bien se pasean entre el centroizquierda y el centroderecha creando la ilusión de que se meten con todo el mundo por igual. En realidad lo único que hacen es reproducir el pensamiento dominante que difunden los medios españoles, los cuales en absoluto son imparciales ni objetivos.
Vayamos ahora con la segunda pregunta: ¿es bueno ser imparcial y objetivo? ¿para qué sirve realmente?
En realidad la pregunta es de por sí imposible de responder, al menos en lo que se refiere al mundo del periodismo. Es que ser imparcial y objetivo no es posible. Es una quimera, una utopía (o más bien una distopía). ¿Cómo debería ser un periodista neutral? ¿de qué hablará? ¿por qué habla de unas cosas y no de otras? ¿es neutral apuntar que los culpables son principalmente los políticos? ¿es objetivo ser equidistante, o más bien es una forma de describir las cosas claramente subjetiva? ¿los periodistas que aseguran que Chávez fue un pseudodictador son neutrales?
Realmente, por mucho que reflexiono, no puedo imaginarme a un periodista objetivo. No es posible. Y de hecho, es mejor que sea así. ¿Cómo daría un periodista neutral la noticia de que han muerto ocho civiles pakistaníes asesinados por aviones estadounidenses? Diría algo así como: "han muerto ocho pakistaníes. Según el Gobierno de Pakistán esto es una intromisión a su soberanía y una violación de los derechos humanos, pero según Obama son solo daños colaterales". El espectador pensaría que esos asesinatos están mal, pero que hay forma de justificarlos y que cada uno puede tener una opinión distinta e igualmente respetable al respecto. ¿Qué diría Ana Pastor de la invasión de los nazis a Polonia? Puedo imaginarla en su programa entrevistando a Hitler y tratando de dar datos imparciales y objetivos. "Bueno, está la versión de Polonia, pero mire lo que dice este diario dirigido por Goebbels...". Eso sí: ella sería muy 'mala' con Hitler, y se metería con él, ¡qué rebelde!.
Aún a riesgo de sonar políticamente incorrecto (lo cual en realidad es bueno teniendo en cuenta lo que se entiende hoy por políticamente correcto), diré que yo no quiero periodistas objetivos ni imparciales. Yo quiero periodistas de verdad, de los que toman partido y denuncian las injusticias. No quiero a un tío que da voz tanto a la izquierda como a la derecha, ni a una tipa que parece muy profesional por meterse tanto con Aznar como con Rafael Correa. Yo quiero un periodismo que le de voz a las fuerzas progresistas y populares, que las otras ya tienen suficiente presencia en nuestros medios. No quiero gente como Ignacio Escolar (otro periodista 'progre') que justifica poner artículos que defienden la explotación laboral en Bangladesh porque "hay que dar voz a todas las opiniones". ¡Como si todas las opiniones fuesen igual de respetables!
(Cabe matizar que Jordi Évole y su programa no son tan condenables como el de Ana Pastor, y que Salvados a veces sí denuncia las injusticias de forma correcta y que en todo caso es lo más a la izquierda que pueden consentir las cadenas privadas. Puede decirse que dentro de lo malo, o de lo aceptable por el sistema, es lo mejor, aunque eso no sirva como excusa para respaldarlo acriticamente)
(Cabe matizar que Jordi Évole y su programa no son tan condenables como el de Ana Pastor, y que Salvados a veces sí denuncia las injusticias de forma correcta y que en todo caso es lo más a la izquierda que pueden consentir las cadenas privadas. Puede decirse que dentro de lo malo, o de lo aceptable por el sistema, es lo mejor, aunque eso no sirva como excusa para respaldarlo acriticamente)
80 comentarios:
Y sí, todas las opiniones son respetables, creo que con esa frase perdiste toda la razón de lo que expones. Las opiniones son respetables, lo que no significa que sea necesario compartirlas.
Voltaire
Por mucho de izquierdas que seas, si eres un fascista eres un fascista. La frase "¡Como si todas las opiniones fuesen igual de respetables!" te retrata. Quién decide entonces qué opiniones son "respetables", tú? y quién eres tú? No te das cuenta que ese argumento es el mismo que utilizan los genocidas para exterminar? Según Hitler, la opinión de los judíos no era respetable porque eran seres inferiores. Lo siento, pero estás totalmente confundido. Tan a la izquierda quieres estar que te vas a dar la vuelta y toparte con la extrema
Calificar de irrespetable una u otra opinión reside en un previo análisis de tu condición social, es decir, tu posición respecto a los medios de producción, y de parte de la clase por la que luches o a la causa de cuál de éstas defiendas.
Todo lo que explote a la clase obrera, que signifique una violación de la autodeterminación de los pueblos, del poder obrero una vez constituído, etc... será criticado por un comunista, por ejemplo.
Utópica y falaz la frase de Voltaire porque bien que arremetió sin piedad ideológicamente contra los pilares del antiguo régimen. No es para nada real ni aplicable su frase. El mundo y las opiniones siguen intereses de clase derivadas de un modelo productivo que genere contradicciones como es el capitalismo. De ahí, diferentes intereses por loe que posicionarse atendiendo a dichas realidades sociales, y de ahí la opinión. Quien se considera imparcial está facilitando la dominación de su modelo contemporáneo porque no petende destruirlo. Está pues de parte, pasivamente, del poder.
Quien por el contrario esté de parte de dicha destrucción de las injusticias derrivadas de la dominación burguesa, estará de acuerdo con el proletariado y su ideología definitoria: el comunsimo. Saludos.
Cuando nos toquen las desgracias en primera persona y ya no nos quede nada, pediremos al resto que aún está sentado tras su pantalla de ordenador haciendo lo que hago ahora mismo, que nos ayude, que independientemente de lo que opine, la realidad es que no sólo soy víctima cómplice del sistema sino que ya ni siquiera me dejan ser cómplice, ya he quedado fuera de éste porque ni siquiera tengo un sueldo que me llene el estómago, y descubriremos que estamos solos, que cada uno/a a lo suyo, y ni Évole es un héroe de guerra ni Ana Pastor es una rebelde, son dos periodistas acobardados ante el grraaaan sistema, nada más.
Voltaire "
--Voltaire nunca dijo eso, es la típica frase tonta que circule, sin fundamento y sin sentido, ya que nadie morirá para defender opiniones que consideren aberrantes (por ejemplo, posturas de Hitler etc).
Lo que dijo fue algo como '¡vaya jaleo por una tortilla'. Libro: The friends of Voltaire.
Todas la opiniones son respetables: ja,ja,ja,ja....
Que cachondeo; ja,ja,ja,....
Las opiniones de los fascistas están vigentes hoy día. Tengo 35 años y no he votado esta constitución española de mierda. No puedo vincularme como ciudadano en las decisiones de estado. Ja,ja,ja,ja,ja. La rebelión tendria que dejar muertos y no hay cojones en este país ni ideales respetables. No respeto a la gentuza de este país ni a sus opiniones.
¿ Radical? está claro!
Voltaire
Por mucho de izquierdas que seas, si eres un fascista eres un fascista. La frase "¡Como si todas las opiniones fuesen igual de respetables!" te retrata. Quién decide entonces qué opiniones son "respetables", tú? y quién eres tú? No te das cuenta que ese argumento es el mismo que utilizan los genocidas para exterminar? Según Hitler, la opinión de los judíos no era respetable porque eran seres inferiores. Lo siento, pero estás totalmente confundido. Tan a la izquierda quieres estar que te vas a dar la vuelta y toparte con la extrema
Me toca bastante la moral lo de llamarle a todo "fascismo". Especialmente ese término, tan tristemente de moda, que es "fascismo de izquierdas", una de las mayores gilipolleces que han salido de la boca de una persona. Este uso tan aleatorio del lenguaje y especialmente del término "fascismo" contribuye a difuminar su significado y a hacer menos identificable el verdadero fascismo.
Otra vez confundiendo el culo con las témporas.
Hitler simplemente quería eliminarlos por ser "el mal que envenenaba a Alemania", más allá de creer que fueran inferiores racialmente, eso no implica en ningún caso que no se pudiera respetar "opiniones" de judios brillantes en sus materias. Más bien al contrario.
Sí, irónico, pero cierto. Mejor es dejar de inventarse historias intentando defender la "honorabilidad" de cualquier cagarro soltado por cualquiera. Las opiniones serán tan respetables como ellas mismas demuestren merecedoras de serlo.
Por cierto, la "honorabilidad" (respetabilidad al fin y al cabo) en los seres humanos también hay que ganársela a pulso, no es algo que automáticamente se tenga a pesar de mil desmanes que se hagan.
Todos sabemos que, en última instancia, el periodismo se mueve por varios fines; el primero de ellos es económico, por supuesto; el resto varía según tendencias... Pero tan reduccionista es tu pensamiento acerca de derecha e izquierda como el considerar a estos periodistas como "rojos", sin que ellos mismos se hayan categorizado como tal o cual.
Mi humilde opinión: todo lo que sale de la TV es caca, información manipulada o tergiversada, o ya apenas eso, mejor decir "jirones" de información, de sobreinformación, sobre todo. Es decir, que todo lo que sale de la pantalla no es más que un producto que estamos consumiendo con uno de los órganos más preciados y preciosos: el cerebro. Con lo cual, si pretendemos un criterio "objetivo" y formalmente aceptable o adecuado con según qué ideologías de izquierdas, de derechas, del revés, o boca abajo, lo único que tenemos que tener en cuenta es, nada más, y nada menos que aquello que ya postuló Descartes como fundamento del conocimiento (episteme) y no la opinión (doxa), esto es, LA DUDA, amigos míos. La duda como método para el conocimiento veraz de esta realidad.
Saludos! @Srta_Payne3
Estoy de acuerdo con el autor, la imparcialidad NO EXISTE. Del mismo modo que creo que NO EXISTE el pensamiento libre en el sentido de ser propio y sin ninguna influencia. En la España franquista se inculcaban unos valores en la educación. En Corea del norte se inculcan también determinados valores en la educación. ¿PERO ACASO EN UNA DEMOCRACIA LIBERAL COMO LA NUESTRA NO NOS ADOCTRINAN? YO CREO QUE SÍ, SE NOS ADOCTRINA CON LA INTENCIÓN DE QUE CONSIDEREMOS LA POLÍTICA ALGO PRESCINDIBLE Y ABURRIDO. SE NOS ADOCTRINA PARA QUE SEAMOS APOLÍTICOS, Y PARA ELLO SE CREAN TODAS ESAS FALSAS IMÁGENES DE LO QUE ES IZQUIERDA Y DERECHA EN EL MARCO DEL SISTEMA CAPITALISTA. LA POLÍTICA TIENE UNA FUNCIÓN: SERVIR AL PUEBLO. POR ESO SOY PARTIDARIO DE LOS REGÍMENES DE PARTIDO ÚNICO. SI SE USAN BIEN Y SIN TIRANÍA SON UNA HERRAMIENTA DE DECISIÓN POPULAR QUE NO DILUYE LA OPINIÓN PÚBLICA EN ESPEJISMOS IDEOLÓGICOS DE "IZQUIERDA" O "DERECHA".
Buenas noches.
El ciudadano, es político por antonomasia. Saludos
Nota. Y soy agnóstica
Un saludo. Gran Artículo.
Voltaire
Por mucho de izquierdas que seas, si eres un fascista eres un fascista. La frase "¡Como si todas las opiniones fuesen igual de respetables!" te retrata. Quién decide entonces qué opiniones son "respetables", tú? y quién eres tú? No te das cuenta que ese argumento es el mismo que utilizan los genocidas para exterminar? Según Hitler, la opinión de los judíos no era respetable porque eran seres inferiores. Lo siento, pero estás totalmente confundido. Tan a la izquierda quieres estar que te vas a dar la vuelta y toparte con la extrema
Tal vez comparar a la Pastor y a Evole, y ponerlos en un mismo universo, no sería del todo justo. Mas, sin embargo, ambos caen el el "error" profesional de un objetivismo rancio, muy dado en opiniones de nuestra pequeña burguesía.
Yo no respeto una opinión de derechas. No me merece respeto por innumerables razones (sociales, económicas, ideológicas, etc). Es el "enemigo". Es el que sostiene un sistema injusto, excluyente, criminal. No lo respeto. Tengo poco que hablar con alguien de derechas. Estaríamos horas divagando cada uno en la suya, y los dos nos marcharíamos pensando que tenemos razón, y qué cabrón este facha/rojo de mierda. El tiempo es un valor sagrado para perderlo con un facha.
Me dirán, claro, si no hay diálogo, qué? la violencia??
Sería redundar en lo que todos reconocemos: los poderosos nos sangran con guerras, con represión, y su sistema financiero. No van a ceder por manifestaciones, gritos en el cielo, escraches, etc. Los poderosos nos "domestican" con todos los medios a su disposición (periodismo y periodistas incluídos), y hay pocos que se sacan una chancla y se la enseñan a la cara al poder y le dice ¿te da miedo?. Descartes hablaba de la DUDA...yo hablo de COJONES
Me gustaría poner un enlace de tu blog en el mío como blog amigos, te importa?
salud.
2) Derivado del punto anterior... la perfección tampoco existe y me refiero a que yo también admito que por ejemplo a Jordi se le vio el plumero en alguno de sus programas (controladores aéreos para mi, dijo lo que la mayoría quería escuchar y eso es populismo barato).
3) Yo también creía que las preguntas que repiten ataques del partido contrario o que parecen hechas por un ciudadano "oveja" pueden parecer absurdas pero no lo son, dan la oportunidad al entrevistado de explicarse y defenderse ante tales argumentos y al mismo tiempo da la oportunidad al espectador de entender una actitud, acción...
4) SI es casi un delito no dar apoyo a este tipo de programas, no porque sean perfectos, si no porque hacen algo distinto, algo más parecido a lo que pueda considerarse periodismo. Apoyando estas iniciativas puede que salgan competencias con esta temática y quizás demos un vuelco a la información vs telemierda/desinformación.
5) Ningún programa es ni será nunca sustituto de la reflexión, el que busca que piensen por el es un borrego... con esto quiero decir, que te guste mucho un programa no puede significar que lo que ahí digan va a misa. De eso hay mucho en este país, a tal punto que ya vemos los programas que dicen lo que queremos oír.
http://emisionenelvientredeunaballena.wordpress.com/2013/02/03/los-propietarios-de-los-medios-de-comunicacion-manipulacion-en-espana/
Y podrán intentar ser lo más objetivos posible, pero desde luego la objetividad es tan difícil que resulta imposible. Pero me parece bien que no se posicionen específicamente en una ideología mientras hacen su trabajo.
La Secta, no es de izquierda y mucho menos neutral. Es de derechas (hablando económicamente) y manipuladora.
Las opiniones son respetables dependiendo de quien las escucha. Ahora, si se deben permitir todas las opiniones, por supuesto, incluso las anticonstitucionales, porque de otro modo no habría libertad, ni espacio para la reflexión y las ideas nuevas.
Respecto a la neutralidad de los señores de la sexta, podrán intentarlo, pero la neutralidad es improbable, no somos robots, somos humanos con diferentes vivencias y formas de expresarnos. Es obligación de cada uno informarse adecuadamente, acudiendo a fuentes diversas para contrastar lo que le cuentan.
Creo que el artículo tiene parte de razón si partimos de la base de que no somos objetos por lo cual nunca seremos objetivos. Como, supuestamente, somos sujetos, SIEMPRE seremos subjetivos en nuestras opiniones, entrevistas, reflexiones y reportajes. Ahora bien, aquí entra el dilema de siempre, ¿es mi opinión mejor que la tuya?, ¿es igualmente valorable?, ¿debemos tolerar todo tipo de opiniones?. Evidentemente hay muchas que nos pueden sacar de quicio y ser absolutamente intolerantes bajo nuestro punto de vista, pero creo prohibirlas porque no nos gusten puede llevarnos a caer en un nuevo tipo de dictadura ideológica (y si tan malas son, irán cayendo por su propio peso). Sinceramente, dudo que ni Ana Pastor ni Evolé tengan opiniones o reportajes intolerantes. Podrán gustarnos más o menos sus programas (ni voy a a entrar en lo del sistema, porque es evidente que trabajan para una empresa y logicamente tienen sus ataduras y ciertas manipulaciones, como TODOS los medios al fin y al cabo), y por supuesto, muchas veces pueden caer en equívocos, como cualquier periodista, pero me da la impresión que también hay "vacas sagradas" para el autor del artículo, que son las que parece que molesta que toquen (como Correa o Cuba). ¿Esos reportajes son buenos o malos?, pues depende de por donde se vean y analicen, ya sabes cual es el estilo de Évole y de Pastor, a mi tampoco me ilusiona periodísticamente, pero parece que cuando critican a Aguirre o lo del metro de Valencia nos gustan, pero cuando critican a los "nuestros" nos molestan. Que conste que no me gusta como se trata la realidad latinoamericana desde los medios españoles, pero no quita que yo mismo cuestione muchas de esas políticas y líderes (sólo hay que ver a Maduro con la charlatanería magufa de las apariciones fantasmales de Chávez y demás para darse cuenta de que también es un populista de tomo y lomo), y no por los medios, si no por muchos amigos y conocidos que viven esa realidad diariamente. Y tendrán ideas y políticas muy positivas en muchos aspectos, pero desde luego no los voy a defender a capa y espada, voy a realizar una autocrítica, y voy a cuestionar a cualquiera que esté en el poder siempre (aunque lo haya votado yo o esté de acuerdo con ciertas ideas).
Voltaire
Por mucho de izquierdas que seas, si eres un fascista eres un fascista. La frase "¡Como si todas las opiniones fuesen igual de respetables!" te retrata. Quién decide entonces qué opiniones son "respetables", tú? y quién eres tú? No te das cuenta que ese argumento es el mismo que utilizan los genocidas para exterminar? Según Hitler, la opinión de los judíos no era respetable porque eran seres inferiores. Lo siento, pero estás totalmente confundido. Tan a la izquierda quieres estar que te vas a dar la vuelta y toparte con la extrema
Dicho esto, a mi Ana Pastor me aburre mucho y ni la veo. Su marido es más cansino aún. Jordi Évole en cambio, me hace reír algo más y me parece más inteligente, aunque a veces ese exceso de ingenuidad suyo es de una impostura que cansa. De todos, sin duda el que me hace más gracia es el Wyoming. Larga vida al Monzón.
Por cierto, la tercera persona del plural del pretérito perfecto simple del verbo "dar", es "DIERON" no "DARON".
En fin, gracias por tu opinión, ya te llamaremos, ...
Yo si me atrevo a llamar a este artículo "sensacionalista". Lo digo por que al empezar a leerlo dices "Caray, alguién que le ha sacado una crítica, una brecha a Salvados que está en la cresta de la ola, con lo difícil que es hacerlo. Sensacional. Tengo intriga por saber más, interés". Y después del calentamiento del primer párrafo (utilizando un captatio benevolentiae victimista y maniqueo bastante flojo), donde ya establece una primera premisa que después retomará: que un periodista o programa sea del gusto de una gran amplitud dentro del arco ideológico político (que también me parece una figura bastante pobre para establecer las variedades de ideología politica) lo inutiliza, viene el segundo donde utiliza la otra figura de "vacas sagradas", o sea, 2 grupos: yo-crítico/demás-acólitos. Bien. Por el momento mucho pathos y poco logos.
Seguimos al tercero y ya en la primera línea comete el prmier error de bulto que le va a viciar tode el artículo, muy naif por otro lado:presentar como el descubrimiento de América "un periodista no es objetivo". Aquí empiza su entrada en barrena conceptual donde va empezar a confundir los conceptos de objetividad, imparcialidad, neutralidad y equidistancia, utilizandolos bajo el término objetividad según el matiz de uno u otro le sirva para enorgdar su argumento.
Y ya, empiza la fiesta "estos periodistas no son buenos porque le meten caña a la gente que piensa como yo y que somos eminentemente buenos" ok colega, veo que me chirrien la falta de libertades en Cuba, que no me parezca mal que un periodista lo pregunte, me hace miembro del régimen, "hacer un reportaje y llamar a todas las partes afectadas es equidistacia" eso es, periodismo de 1ºDivisión, una 13Tv de lo que a ti te mola es lo que nos hace falta pues.
Y así llegamos al maravilloso párrafo bajo la foto de Ana Pastor. Aquí nos regala la luz, el camino, la esperanza: "Realmente, por mucho que reflexiono, no puedo imaginarme a un periodista objetivo. No es posible. Y de hecho, es mejor que sea así." :plas, plas, plas, maravíllenese, enohrabuena zagal, ya tienes medio crédito de la asignatura de teoría de la información de 1º de carrera. Ve y cuéntaseló a Évole que seguro que te lo agradece un montón. Acto seguido mezcla descaradamente equidistancia y objetividad para ponerle la guinda al final del párrafo, una ley de Godwin de libro. Demostrando gran bagage, yeah.
Y para concluir, al final, se muestra: "dar voz a todas las partes es igual a respetar todas las opinones" ¿Viste el Salvados del Metro de Valencia?, ¿Mal por da voz a todas las partes?, ¿Inside Job, mejor si no hubieran hablado con la gente de los bancos?
A mí tampoco me gusta que Ana Pastor se arroge objetividad sucintamente con el tratamiento de su programa, pero si le agradezco que su programa tenga la mayor cantidad de datos posibles, no pdemos ser objetivos, los datos (y hasta con su presentación pueden ser parciales) es lo único que nos ENFOCA hacia la idea de objetividad, pero eso es sólo el principio, hay que rellenarlo con mil cosas más (distintas opiniones ayuda).
Tartar de definirse como objetivo es como tratar de definir el bien y el mal. Bien y mal que se nos ha estado mostrando desde la primera hasta la última letra de este artículo. El chantaje intelectual bien-yo/mal-no yo. Gracias internet por dejarnos decir todas las sandeces que queramos.
David Locoestas, tu opinón, como ves, me parece una puta mierda. Pero me parece correcto (que no bien) que puedas expresarla.
http://www.czukowilliams.com/apps/blog/mala-praxis-y-mentira-carta-abierta-a
En fin, un placer haberte leído. Sigue así,
rafarrojas
En el resto del artículo estoy totalmente de acuerdo.
No quiero Intereconomías, 13TVs y COPEs de izquierdas. La madurez consiste en leer y escucharlo todo para que cada persona saque sus conclusiones. Los extremismos son más iguales entre ellos que el PP y el PSOE entre sí: a ningún puerto conducen y se pierden dando golpes con los remos a las aguas embravecidas del océano.
En todo caso, todo el mundo clavado ante las pantallas o los altavoces radiofónicos tratando de sintonizar lo que sus oídos quieren escuchar.
Salud y pensamiento.
Pienso que ni Ana Pastor ni Jordi Évole son objetivos ni neutrales. Ni tienen por qué serlo.
No me importa un carajo a quién voten o dejan de votar.
Como ciudadano, con mi ideología, considero que el programa de "El Objetivo", dirigido y presentado por Ana Pastor, es bastante flojo y ella, como periodista me pone de los nervios: ¿es que es mejor periodista que otros por "asediar" a sus invitados bajo un supuesto manto de objetividad y tenacidad? NO.
Como ciudadano, con mi ideología, considero que el programa "Salvados",dirigido y presentado por Jordi Évole, es bastante digno y está bien hecho. Y esto no significa que yo esté de acuerdo con todo lo que dice, no dice o insinúa el presentador. Simplemente, aborda los temas desde un enfoque que permite al espectador sacar sus propias conclusiones, cosa que no creo que se consiga con el formato "agresivo" y obsesionado con los "datos" que presenta su compañera Ana Pastor.
En resumen, encuentro distancias ideológicas con ambos periodistas y no pretendo en absoluto criticarles por su forma de pensar. Sin embargo, me parece importante distinguir entre la calidad de contenidos y de formatos de los programas que cada uno dirige. No hay color, me quedo con Salvados, que, para mi, está al mismo nivel que el de la Sexta Columna, de Antonio García Ferreras, otro excelente profesional (del que no sé ni me importa a quién vota).
comparto lo que se comenta en el artículo de pe a pa. de hecho yo no solía ver el programa y cuando me animé a hacerlo me gustó el de évole (no tenía conocimiento de lo de cuba, venezuela...), aunque con alguna salvedad, pero ana pastor nunca me ha interesado lo más mínimo. la ví descolocarse con correa, con ahmadinellad, pretender protagonismo... y en esta etapa del objetivo me saca rubor. ¿vísteis el de la monarquía?
George Orwell
Con esto contesto tus argumentos. Un periodista puede ser objetivo contando lo que nadie quiere oir (sean de un partido u otro). Esto es doloroso pero no quita objetividad, ni neutralidad.
Por otra parte, creo que hay un sentido del término "objetivo" que nada tiene que ver con el sentido en el que en el texto se dice que no es posible ser objetivo en periodismo. A saber, yo entiendo que se puede ser objetivo en el sentido lógico-lingüístico en el que 1) al informar se debe ser fiel a los hechos y 2) hay que distinguir los hechos de las opiniones personales y las valoraciones. Por ejemplo, un periodista objetivo en este sentido informando sobre la invasión nazi de Polonia: "Hitler ha invadido Polonia y bla, bla, bla. En nuestra opinión, su objetivo es, tal y como dijo en Mein Kampf, invadir Rusia y arrasar con todo lo vivo, etc."
Lamentablemente, este sentido de objetividad es poco conocido, pues viene de unos ámbitos de conocimiento tan denostados y arcanos para casi todo el mundo como la filosofía de la matemática, la filosofía del lenguaje y la filosofía de la lógica.
Quería escribirte por un artículo tuyo publicado en "Les Communards" (buen nombre por cierto) el pasado 27 de noviembre sobre el periodismo objetivo. Lo he leído varias veces y he sufrido síntomas serios de DIARREA. ¿Cómo se puede ser tan mediocre a la hora de criticar una cosa (primordialmente que los periodistas Évole y Pastor no son objetivos) si luego DEFIENDES un tipo de periodismo subjetivo?
Entiendo ese deseo de desmontar los sobrevalorados programas televisivos “Salvados” y “El Objetivo”, sin embargo más adelante proclamas que el programa de Évole (que acuerdo contigo, es mejor que el de la insufrible Pastor) “es lo más a la izquierda que pueden consentir las cadenas privadas”. Es más, me EMPALAGA ese sabor dulzón que presiento que es orgullo de pertenecer a la izquierda más radical y que repites varias veces nada más empezar el artículo (¿”es que tú o es un programa comunista o nada”? ¿“un comunista resentido y malvado que critica a todo y a todos”?).
Todo esto todavía podría pasar, no es nada del otro mundo que alguien se aferre a una ideología que estructure sus pensamientos y farde de ello. Lo que hace que se me REVUELVAN LAS TRIPAS es el uso de palabras como “quimera” o “distopía” incorrectamente, y es que el logro de obtener algo de objetividad en un mundo de información como puede ser el periodismo no tendría que estar comparado a un monstruo mitológico o señalado como algo que realmente nadie desea.
No. Las opiniones no son respetables, lo que hay que respetar son las personas, pero las ideas, si se exponen, deben de poder ser burladas, ninguneadas o tachadas de estúpidas. Lo que dices es estúpido, pero nunca digas eres estúpido.
Los invito a visitar mi blog !
http://geraldocapillo.blogspot.com/
Gracias !
A mi si me gustan Evole y Pastor porque creo que siempre preguntan a la contra, como debe ser, siguiendo el estilo de la BBC. Hay que entrevistar a un comunista como si uno fuera de derechas y a uno de derechas como si se fuera comunista, hay que realizar las preguntas mas incomodas y enfrentar al entrevistado a las cuestiones mas delicadas y acusaciones mas duras que se le realizan por parte de la sociedad u otras personas, ya tiene el entrevistado tiempo y ocasion de defenderse y argumentar. Por ello no me parecen en absoluto impertinente ni sesgadas las preguntas que en este articulo se cuestionan, lo cuestionable es que no se realizaran. Si nos molesta que a los nuestros les realicen preguntas incomodas es que no estamos siendo imparciales nosotros.
Por lo demas creo que a Evole y Pastor se les nota la ideologia que profesan a pesar de las preguntas que puedan realizar contra politicos de izquierda. El deber es preguntar, a la contra, y no opinar, no dejar saber al espectador lo que pensamos, ni con nuestras palabras ni expresiones, esto es algo muy dificil de conseguir
Lo respetable son las personas: las opiniones, por el contrario, solo se respetan tomándolas en serio y por tanto criticándolas cuando lo merecen.
Las teorías, opiniones, modelos, etc. hay que someterlos a crítica, análisis… vapulearlos y exprimirlos hasta que se derrumben o prueben su consistencia con los hechos conocidos.